lunes, 10 de marzo de 2014

RESULTADOS MAS RÁPIDOS: EN BUSCA DE LA INTENSIDAD


 
Son muchos los caminos, aunque si queremos resultados de forma más rápida, la palabra intensidad siempre aparece… no solo esa, también dificultad, complejidad, alto impacto… son muchos los términos que se utilizan aunque no sean sinónimos exactos, o tengan un significado completamente diferente. Independientemente de los conceptos, bien es verdad que si buscamos resultados visibles en periodos más cortos de tiempo, hay varias consideraciones que nos van a ser muy útiles a la hora de entrenar.
 Entrena en calidad
El cuerpo es sabio y se adapta a lo que se le somete. Si lo acostumbramos a realizar ejercicios con gran corrección de ejecución (técnica, táctica, cognitiva), se favorece un desarrollo armónico en busca de lo que deseamos. Si por el contrario la fatiga, el cansancio, las malas ejecuciones, la falta de atención… ganan protagonismo, serán estas las que nos llevarán al final a un estado de desequilibrio que no queremos.

Ten en cuenta  los fallos técnicos, no musculares
Entrenamos en los límites corporales y para ello tenemos primero que pulir nuestras ejecuciones. La técnica tiene que respetar en la medida de lo posible nuestra estructura corporal. Cuando los músculos empiezan a fallar, además de poner en peligro nuestro cuerpo, tardaremos más en lograr nuestros objetivos.
Al hablar de fallos técnicos también me refiero a las posibles ejecuciones que impliquen decisiones tácticas (como puede ser en los deportes de equipo) o emocionales. Es decir cuando no hacemos bien lo que tenemos que hacer, es mejor recuperar, evaluar, corregir e intentarlo de nuevo (ese día u otro distinto). Cuidado con tener muchos días malos seguidos a la hora de entrenar¡¡¡¡ algo no estamos haciendo bien.

Concentración y atención  óptima
Concentrarse de forma intensa en la tarea, mantener una atención alerta sobre lo que se hace. Si quieres aumentar la intensidad debes abstraerte de todo lo secundario, tienes que atender a lo principal, estar concentrado en la ejecución, escucharte.  Si, sentir como quema el bíceps cuando levantas esa mancuerna o notar la respiración al correr, corregir tu frecuencia de brazada o atender a los posibles receptores de un pase. Un entrenamiento intenso requiere presencia, mucha presencia y cuanto más presente consigas estar, mayor la recompensa.  Realiza ejercicios o tareas que tengan un nivel de dificultad que requieran de tu presencia a todos los niveles (cognitiva, coordinativa, emocional…) no sólo física.

Errores como punto de partida para aumentar la complejidad
Cuando tu cuerpo se encuentra en dificultades, es más torpe, se fatiga más, nos equivocamos con más frecuencia. Busca situaciones en las que tu cuerpo se encuentre con dichas dificultades, para ello hay utilizar la variabilidad de los ejercicios o tareas (puede ser una variación en una tarea de juego como el fútbol o una variación en la velocidad de carrera o la técnica de entrenamiento de un grupo muscular…). Es bueno que sean pequeños cambios y progresivos ya que el organismo los detecta mejor. A medida que vamos practicando, tu cuerpo se va adaptando y las ejecuciones o ejercicios ganan mucha calidad, ese es el momento de volver a cambiar, de buscar nuevos estímulos.


Juega con las recuperaciones
Cuando entrenamos con intensidades elevadas, es importante que las recuperaciones entre ejercicios y entre sesiones sean suficientes. Las sensaciones de afrontar un entrenamiento intenso en un estado óptimo, son necesarias. Los procesos de recuperación son tan importantes como los de entrenamiento, y cuando los ejercicios se elevan en intensidad, la importancia de una buena recuperación es mayor.

Busca anclas de motivación
Los entrenamientos con intensidades elevadas son exigentes y por lo tanto la motivación juega un papel fundamental. Tener unos objetivos claros y una estrategia bien estructurada te ayudará a seguir con las rutinas marcadas. Redactar tus objetivos más ambiciosos, visualizar o tener ideas claras y bien formadas de en que quieres convertirte o que quieres conseguir, pueden ser buenas herramientas para utilizar. Otras formas pueden ser compartir entrenamiento o comenzarlo con actividades agradables como juegos, música…

Atento a los mensajes
Es bastante posible que cuando llevamos una temporada larga entrenando en intensidad aparezcan indicadores de sobreentrenamiento. Además de aparecer en forma de lesión pueden manifestarse en estados de ánimo, falta de sueño o de apetito… Si tu intuición dice que es momento de recuperar, puedes planificar:
Disminuir la intensidad
Cambiar de actividad
Descansar totalmente

En definitiva, entrenar a un nivel muy elevado, recuperando bien y buscando altos niveles de calidad de ejecución. Esto nos proporcionará llegar antes a donde nos hemos marcado.